¿Sabes realmente qué decirle a una persona con ansiedad o estás metiendo la pata? Si no sabes realmente qué cosas no decir a alguien con ansiedad, sigue leyendo ¡Esto te interesa!
Aunque nuestras intenciones sean buenas, a veces nos equivocamos a la hora de ayudar a una persona con ansiedad, provocando que se encuentre peor, haciéndole sentir culpable o avergonzándola.
Tanto la emoción de ansiedad como el miedo son emociones reales que está sintiendo en esos momentos y afectarán a cómo recibe lo que le digas. Por eso es importante saber qué NO es recomendable decirle a una persona con ansiedad.
«Relájate»
Una persona con ansiedad ya sabe que debe relajarse, lo que a menudo ocurre es que no sabe cómo hacerlo, y pedirle a alguien algo que quiere pero no puede es muy frustrante. Para aprender ayudará ir a terapia.
«Lo estás exagerando»
La persona con ansiedad no sufre los síntomas porque quiere. Aunque a ti pueda parecerte una situación sin importancia, a esa persona puede sobrepasarle.
A veces puede no haber motivos pero los trastornos de ansiedad tienen un origen más complicado y los síntomas pueden aparecer sin que aparentemente haya una causa concreta.
«Yo también tengo ansiedad porque tengo muchas cosas que hacer»
La ansiedad no es estrés o nerviosismo. Tener muchas cosas que hacer o muchas preocupaciones que te hagan estar alterado/a en un momento puntual no implica tener un trastorno.
«Intenta no pensar»
Es imposible no pensar. Por eso, para gestionarlo podemos focalizar la atención en otra cosa que nos haga sentir bien o que distraiga nuestra cabeza (hacer otra actividad, parada de pensamiento, relajación…).
«Piensa en cosas positivas»
En un momento de ansiedad, cuando el corazón late a mil, falta el aire o presiona el pecho, a la persona le es casi imposible pensar en cosas positivas. Lo que si podemos hacer es razonar el pensamiento.
La terapia es fundamental para aprender a hacerlo
A continuación, te damos frases alternativas que puedes decirle a esa persona. Recuerda que lo fundamental es la empatía y saber escuchar.
- Sé que esto es complicado
- Respira conmigo
- Si necesitas que haga algo, dímelo, yo te ayudo
- Desahógate lo que necesites, te escucho, no te juzgaré
- Vamos a salir a tomar el aire
- Estoy aquí contigo, no te ocurrirá nada
- Vamos a hacer otra cosa
- Cuando estés más tranquilo/a podemos razonar lo que estás pensando o buscar una solución
- No te sientas mal por estar así
Si te ha gustado esta entrada, no te pierdas el artículo sobre cómo acompañar en un ataque de pánico.
No se permite la reproducción y/o publicación, total o parcial, del sitio web y el contenido del blog, ni su tratamiento informático, su distribución, difusión, modificación o transformación, sin el permiso previo y por escrito de io-social.
Pingback: Cómo acompañar en un ataque de pánico - io-social